10 ways to avoid toxic chemicals

Versions of this post appear in both English and Spanish languages below.

The science is clear: harmful chemicals in our environment put healthy pregnancies and fetal development at risk. To help health-care professionals and their patients better understand how chemicals affect health—and what they can do about it—UCSF’s Program on Reproductive Health and the Environment has joined with the International Federation of Gynecology and Obstetrics (FIGO) and the Health and Environment Alliance (HEAL) to develop a series of materials that can be used in physicians’ offices around the globe.

The series highlights 10 chemicals and chemical groups people should avoid and provides 10 easy ways for people to reduce contact with these chemicals. They include:

  • Bisphenols (often used in plastic water bottles)
  • Flame retardants (found in some furniture and electronics)
  • Lead (found in homes, plumbing materials, paint, batteries, cosmetics, ammunition, as well as air, water, and soil)
  • Mercury (in large fish such as swordfish and tuna, some antiques, electronics, jewelry)
  • Perchloroethylene (PERC) and tetrachloroethylene (TCE) (stain removers typically used by dry cleaners)
  • Pesticides (used in a wide range of food and agricultural products)
  • PFAS (nonstick cookware, waterproof clothing, stain resistant carpets, fire-fighting foam, some cosmetics)
  • Phthalates and Plasticizers (toys, vinyl flooring, personal care products, food and water)

“The most common question ob-gyns get from their patients is—which chemicals do I need to avoid and how do I do that?” said Jeanne Conry, MD, PhD, past president of the American College of Obstetricians and Gynecologists and president-elect of FIGO. “With new discoveries on how the environment affects our health happening every day, we need to bring doctors and patients up to speed on what chemicals to avoid and why that matters.”

The educational initiative follows FIGO’s 2015 consensus statement on Reproductive Health Impacts of Exposure to Toxic Environmental Chemicals, which included four calls-to-action for ob-gyns and other health-care professionals. They are:

  1. Advocate for policies to prevent exposure to toxic chemicals
  2. Work to ensure a healthy food system for all
  3. Make environmental health part of health care
  4. Champion environmental justice

“Individuals can only do so much to protect themselves, so advocating for policies to reduce the amount of harmful chemicals being used in the first place is vital for healthier people and healthier pregnancies,” said Tracey J. Woodruff, PhD, professor and director of UCSF’s Program on Reproductive Health and the Environment, and FIGO opinion co-author.

“We need better policies to protect people from toxic chemicals,” said Conry. “Fortunately, there are simple steps people can take to reduce their exposures.” Tips include:

  1. Avoid eating, drinking, or storing food in plastic
  2. Don’t microwave in plastic
  3. Cook with cast iron or stainless steel rather than nonstick pans
  4. Avoid eating fish high in mercury like shark or swordfish
  5. Eat fresh organic foods whenever possible
  6. Limit cosmetics use
  7. Avoid dry cleaning or stain treating clothes
  8. Use a wet mop when cleaning
  9. Avoid consumer products with flame retardants
  10. Remove shoes before entering your home

In addition to doctors’ offices, the materials will be shared as part of a social media campaign that launched July 27, 2020. Help spread the word by sharing the materials from one of the partners’ social media channels, FIGO’s Dropbox, HEAL’s website, or this blog.


10 Maneras de evitar las sustancias tóxicas

La ciencia es clara: las sustancias tóxicas presentes en el medio ambiente ponen en peligro a los embarazos saludables y el desarrollo fetal. Para ayudar a los profesionales de la salud y sus pacientes a entender mejor cómo las sustancias químicas afectan la salud (y qué se puede hacer al respecto), el Programa sobre Salud Reproductiva y Medio Ambiente de UCSF se ha unido a la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) y la Alianza por la Salud y el Medio Ambiente (HEAL, por su sigla en inglés) para desarrollar una serie de materiales informativos que se puedan usar en los consultorios médicos de todo el mundo.

La serie destaca 10 sustancias y grupos de sustancias que todos deberíamos evitar y presenta 10 maneras fáciles para reducir el contacto con esas sustancias químicas, que incluyen:

  • Los bisfenoles (suelen usarse en botellas plásticas de agua)
  • Los retardantes de fuego (se encuentran en algunos muebles y productos electrónicos)
  • El plomo (se encuentra en los hogares, en materiales de tuberías, pinturas, pilas, cosméticos y municiones, así como en el aire, el agua y el suelo)
  • El mercurio (presente en pescados grandes como el pez espada (swordfish) y el atún (tuna), en algunas antigüedades, algunos productos electrónicos y algunas alhajas)
  • El percloroetileno (PERC) y el tetracloroetileno (TCE) (quitamanchas típicamente usados en tintorerías)
  • Pesticidas (utilizados en una amplia variedad de alimentos y productos agrícolas)
  • Las sustancias PFAS (se encuentran en artículos de cocina antiadherentes, en ropa resistente al agua, en alfombras resistentes a las manchas, en espuma para extinguir incendios y en algunos cosméticos)
  • Ftalatos y plastificantes (en juguetes, pisos de vinilo, productos de cuidado personal, alimentos y agua)

“La pregunta más común que las pacientes les hacen a sus obstetras y ginecólogos es: ¿Qué sustancias químicas tengo que evitar y cómo puedo hacerlo?,” dice Jeanne Conry, médica doctorada, ex presidente del Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, y presidenta electa de la FIGO. “Todos los días surgen nuevos descubrimientos sobre el efecto del medio ambiente en nuestra salud y necesitamos poner al día a médicos y pacientes, indicarles qué sustancias químicas evitar y explicarles por qué es importante hacerlo.”

La iniciativa educativa sigue la declaración de consenso de la FIGO presentada en 2015 sobre Los impactos de la exposición a sustancias ambientales tóxicas en la salud reproductiva, que incluyó cuatro llamados a la acción dirigidos a los ginecólogos y obstetras así como a otros profesionales de la salud:

  1. Abogar por políticas que prevengan la exposición a sustancias químicas
  2. Trabajar para asegurar un sistema alimentario saludable para todos
  3. Incorporar la salud ambiental al cuidado de la salud
  4. Luchar por la justicia ambiental

“Hay límites con respecto a lo que los individuos pueden hacer para protegerse. Por eso, abogar por políticas que reduzcan el uso de sustancias tóxicas en primer lugar es fundamental para fortalecer la salud de las personas y los embarazos,” dice Tracey J. Woodruff, doctorada, profesora académica y directora del Programa sobre Salud Reproductiva y Medio Ambiente de UCSF, así como coautora de la declaración de la FIGO.

“Necesitamos mejores políticas para proteger a las personas de las sustancias tóxicas”, dijo Conry. “Afortunadamente, existen medidas simples que las personas pueden tomar para reducir su exposición.” Las siguientes recomendaciones son alguna de ellas:

  1. Evite comer, tomar o guardar alimentos en recipientes de plástico.
  2. No use plástico en el microondas.
  3. Cocine en hierro o acero inoxidable en vez de en superficies antiadherentes.
  4. Evite comer pescado con alto contenido de mercurio, como tiburón (shark) o pez espada (swordfish).
  5. Coma alimentos frescos orgánicos siempre que sea posible.
  6. Limite el uso de cosméticos.
  7. Evite lavar la ropa en seco o tratarla con quitamanchas.
  8. Use un trapeador húmedo para limpiar.
  9. Evite los productos de consumo que tengan retardantes de fuego.
  10. Quítese los zapatos antes de entrar a su casa.

Además de distribuirse en consultorios médicos, los materiales educativos se compartirán como parte de una campaña en las redes sociales lanzada el 27 de julio de 2020. Ayúdenos a difundir el mensaje compartiendo los materiales desde los canales de redes sociales de nuestras organizaciones, el sitio de la FIGO o este blog.

Translation by Julieta Pisani McCarthy.